Agrícola
Las enmiendas de suelo son esenciales para mejorar las características fisicoquímicas de suelos empobrecidos. Estas no solo potencian la fertilidad y la absorción de nutrientes, sino que también promueven la recuperación y equilibrio del suelo, esencial para maximizar el rendimiento de los cultivos y preservar la salud del sustrato. Las enmiendas incrementan la retención de agua, optimizan el intercambio catiónico (CIC) y potencian la actividad microbiana, lo cual es beneficioso para el enraizamiento y desarrollo de los cultivos.
Nuestras enmiendas de suelo, formuladas en forma liquida, son productos de última generación, no solo corrigen problemas que impiden el óptimo desarrollo de los cultivos, sino que también mejoran integralmente la calidad del suelo y al mismo tiempo nutren el cultivo. Esto permite un aprovechamiento más eficiente, tanto de los propios recursos del suelo, como de los nutrientes añadidos.
El uso adecuado de enmiendas asegura la sostenibilidad del suelo a largo plazo, garantizando la continuidad y efectividad de la actividad agrícola. Así, se previene el agotamiento del suelo y se corrigen problemas derivados de su composición, como acidez, salinidad o compactación.
Nuestra línea de Fertilizantes-Bioestimulantes se compone de productos diseñados para potenciar el metabolismo de las plantas, proporcionando elementos nutricionales esenciales requeridos en cada etapa fenológica del cultivo. Estos bioestimulantes, enriquecidos con reguladores de crecimiento, aminoácidos, polisacáridos, ácidos orgánicos y vitaminas, no sólo fomentan el crecimiento y mejoran el rendimiento y calidad de los cultivos, sino que también fortalecen las plantas.
El principal objetivo, además de incrementar la produccion, es desencadenar reacciones bioquímicas naturales en los cultivos, brindándoles una protección adicional contra el estrés, esto también les permite aprovechar y absorber los nutrientes de manera más eficiente. A través de la bioestimulación, no sólo se mejora la salud y robustez de la planta, haciéndola más resiliente frente a plagas y enfermedades, sino que también se reduce la dependencia de productos químicos. Al fortalecer las defensas naturales de la planta, promovemos un enfoque más ecológico y sostenible en la agricultura.
Nuestros fertilizantes hidrosolubles, formulados a partir de bioestimulantes y concentradas materias primas minerales, están libres de impurezas fitotóxicas. Estos fertilizantes se compone de NPK microcristalinos diseñados específicamente para fertiirrigación y aplicación foliar. Estos aportan soluciones precisas para las variadas necesidades nutricionales y etapas fenológicas de los cultivos.
Con la creciente demanda en la producción agrícola, una fertilización eficiente se ha consolidado como la respuesta clave. La agricultura de vanguardia debe garantizar un suministro óptimo de nutrientes durante todo el ciclo de crecimiento del cultivo de manera sostenible, sin comprometer la integridad del suelo ni los recursos hídricos. Técnicas como la Fertiirrigación y la nutrición foliar maximizan la eficiencia en el uso de nutrientes.
Características destacadas de nuestros productos:
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Total solubilidad en agua.
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Constitución de un 100% de nutrientes esenciales para plantas.
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Enriquecidos con microelementos,
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Composición única con bioestimulantes que hacen mas aprovechables los nutrientes.
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Completamente libres de cloruro, sodio y otros elementos adversos para las plantas.
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Contienen silicio en forma de óxido de silicio, el cual fortalece la sustentación física de los cultivos y los protege del ataque de agentes patógenos.
Nuestros fertilizantes líquidos son correctores de carencias formulados a partir de ácidos carboxílicos. Estos ácidos, orgánicos por naturaleza, son producidos de manera intrínseca por las plantas. Dada su procedencia, replican en los cultivos efectos similares a los que tienen estos ácidos en la fisiología vegetal natural.
Compuestos por estructuras de 2 a 8 carbonos y con un bajo peso molecular, estos ácidos carboxílicos poseen una destacada movilidad tanto en el suelo como en la planta. Su presencia facilita la asimilación de nutrientes y juega un papel crucial en los procesos metabólicos de los carbohidratos, que son las principales moléculas encargadas de proporcionar energía a las plantas.
